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El dia de hoy quiero retomar una parte de lo que compartí el domingo pasado, creo que el Señor nos está guiando como iglesia local a seguir hablando acerca de conocer a Dios a través de la influencia conjunta de la exposición a su Palabra y de la obra del Espíritu Santo.

 

Cuando hablé de las evidencias del nuevo nacimiento, inicie hablando de la relación entre la influencia del Espíritu Santo y la Palabra de Dios  en la regeneración y no solamente para la regeneración, sino que seguirá influenciando para nuestra santificación. 

 

Hermanos ¿Cómo está el tema de vivir una vida santa para Dios? ¿Se ha convertido algo prioritario en su vida? Hemos escuchado que el que ha nacido de nuevo ya no puede seguir viviendo como antes, la disposición de su corazón ha sido revolucionada. El que ha nacido de nuevo ha sido justificado delante de Dios, los pecados que los separaban de su relación con Él han sido perdonados y el castigo que él merecía por su rebeldía a Dios ya ha sido pagado, Jesús con su sangre perdonó nuestros pecados (Mateo 26:28) y con su muerte sufrió el castigo que nosotros merecíamos (Col. 1:20-22) y con su resurrección asegura todas sus promesas y nuestra relación eterna con Dios (1 Pedro 1:1-3). Como dice Colosenses 1:22, que por medio de Cristo ya hemos sido presentados santos, libres de culpa y sin ninguna falta delante de Dios. La justificación fue una obra pasiva, yo no tuve que hacer nada para ganarla o merecerla, sólo la recibí por gracia. 

 

¿Pero ahora que soy justificado que sigue? Comienza mi proceso de caminar en dirección a Dios, lo llamamos el proceso de santificación, en la Palabra encontramos que el llamado de los que han creído en Jesús es el ser santos, Pablo inició sus cartas llamando santos a los creyentes y en Romanos 1:7 el escribió, "a todos los que estáis en Roma, amados de Dios, llamados a ser santos: Gracia y paz a vosotros, de Dios nuestro Padre y del Señor Jesucristo.", en Efesios 1:4 "según nos escogió en él antes de la fundación del mundo, para que fuésemos santos y sin mancha delante de él," 

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En la primer carta de Pedro 1:15-16 vemos el llamado más específico a la santidad, "sino, como aquel que os llamó es santo, sed también vosotros santos en toda vuestra manera de vivir; porque escrito está: Sed santos, porque yo soy santo." 

 

Aquí Pedro hace mención de un texto del antiguo testamento (Éxodo 3:5, Levítico 11:44), muchos cristianos han creído que por estar ahorá en el nuevo pacto Dios ha cambiado, ha bajado sus estándares, que ahora ya es puro amor, olvidando así sus otros atributos, la Palabra dice que nunca cambia, que Él es el mismo ayer, hoy y siempre, que es inmutable. Él sigue siendo el Dios del Antiguo Testamento, el que habita en luz inaccesible, el que no tiene trato con el pecado. 

 

Ahora el cristiano tiene que estar más conciente de este grande Dios que tenemos, Él no bajó su estandar, no olvidó nuestros pecados, no los pasó por alto, el fue justo y alguien recibió nuestro castigo y fue su Hijo, tuvo un alto costo, y que ahora nos podemos presentar delante de Él por la justicia y perfección de otro, el apóstol Pedro dice que fuimos rociados con la sangre de Jesús, estamos delante de Él por la justicia y el merecimiento de su Hijo. No es una gracia barata. 

 

¿Cuántos creyentes han perdido la reverencia delante de Él? Él sigue siendo el mismo, ¿Cuántos ya no tiemblan ante su Palabra? si cuando el pueblo de Israel andaba en el desierto veía temblar los montes cuando Él hablaba, y ahora vemos a gente en las iglesias que se duerme, o que les aburre, o que quieren que se las prediquen más bonito. No se trata de lo carísmático del predicador o de la ayuda de la tecnología, sino acerca de quien estamos hablando.

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El punto aquí es, que si realmente hemos sido justificados, si realmente hemos nacido de nuevo, esa fe nos llama a vivir diferente, la justificación fue una obra pasiva, pero la santificación contiene una parte activa de la vida del creyente, porque ahora ya puede escoger a Dios, porque hay una nueva creación en él y entonces comienza a vivir para Él.

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Sigue viendo a Dios como es Él y ahora el sacrificio de Cristo toma una magnitud mayor ¿Cómo ahora puedo estar cerca del Dios del Antiguo Testamento que es Santo, Santo, Santo? ¿Cómo me puedo presentar delante de un Dios así en el juicio y poder ganarle? y ahora ya puede ver el horizonte una cruz alzándose y un hombre sin culpa muriendo, absorbiendo el pecado del mundo dándole a él su inocencia e invitándolo a acercarse a este Dios por medio de Él. Ahora ve esta gracia, pero no barata, sino altamente costosa.

 

El llamado genuino de un Cristiano es ser santo, cómo El es santo, no hay otro, no es el ser exitoso, próspero en lo material, ser llamado a las naciones, tener grandes ministerios, ser un gran músico, el llamado es ser santo, como Él es santo, pero para hacer más claro este llamado, es ser cada vez más como Cristo, Él es nuestro modelo, ser como el Dios de la Palabra.

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Pero aquí surge una pregunta ¿Como aspirar a ser como alguien que no conozco? Cada creyente debe ocuparse de su relación con Dios, cada domingo he estado compartiendo temas importantes aquí, y en general, si ustedes se han fijado casí siempre el Señor nos ha  exhortado a que leamos la Palabra, pregunta ¿Ya lo hicimos?

 

Hermanos veamos la fuerza de nuestra carne, que el Espíritu Santo abra hoy nuestro corazón para escuchar, el domingo pasado, Dios abrió mis ojos cuando escribía la pregunta ¿Seré más sabio que Dios? al terminar de leer Colosenses 1:15-20, y comentaba en el mensaje, que la razón de no tomar en cuenta a Dios en nuestras vidas, para todos los asuntos es porque no le conocíamos, comenté:

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"La razón del porqué no tenemos a Cristo en nuestras vidas y familias es porque no le conocemos, porque nuestra visión de Él es tan estrecha que nos hemos considerado a nosotros mismos más sabios que Él para dirigir nuestras vidas y nuestras familias. Es por eso que muchos creyentes tienen su Biblia sin abrir. Si el Espíritu Santo nos revelara lo que acabamos de leer (Colosenses 1:15-20), que de esto esta impregnada toda la Biblia, nos quisieramos hacer polvo delante de Dios, no hallaríamos palabras para agradecerle la oportunidad de llevar su señorío, de tener el gran privilegio de ser enseñados y guiados por Él, entonces indagaríamos en su Palabra como se vive en Cristo, cual es mi rol en la familia, como debo hacer mi trabajo, en pocas palabras como vivir para su gloria. Ya no sería el diosito del domingo, sino el Señor y Dios de todas las cosas."

 

La semana pasada me propuse en mi corazón el ir a la Biblia pero no para leerla nada más, sino para conocer a Dios, hay en mi un deseo de encontrar, en lo que estoy leyendo, como es Dios y luego desear y orar al Espiritu Santo que obre en mí para ser como Él. Estoy es esta jornada, se que tengo buenos libros que leer y que en verdad me han inspirado, pero no debo sustituirlos con la Biblia, el día de hoy les hago un llamado a escudriñar la Palabra y buscar ahí a cómo es Dios y ahora en el nuevo pacto cuál es nuestra posición o condición, veamos un ejemplo de lo que les digo en el Salmo 5:

  • De los versículos del 4-7 vemos como es Dios, Él no ha cambiado 

  • De los versículos de 7-8 encontramos que David alaba la gracia de Dios y que es por ella y por su fe en Él que el puede estar en su presencia.

  • De los versículos del 9-10 vemos cuál es la condición del hombre sin Dios y lo que merecemos por nuestra rebeldía. 

  • Del versículo del 11-12 vemos que es lo que obtienen los que creen en Él, los justos.

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Todo esto lo podemos relacionar con el Evangelio, ahora en Cristo Dios no deja de ser el de los versículos del 4-7, somos bienvenidos a entrar a su casa por la gracia amorosa que nos fue dada por medio de Cristo, el hombre sin Cristo siguen mereciendo lo de los versículos 9-10 el ser rechazados por Dios, de hecho Pablo usa parte de estos versículos en la carta de Romanos y nosotros entendemos que fuimos hechos cercanos por Cristo. Ahora podemos alegrarnos como dicen los versículos del 11-12 y cuando dice que Dios bendice al justo, entendemos que no se refiere al que se porta bien o que hace buenas obras, en el antiguo pacto era el perteneciente al pueblo de Israel y que confiaba en Dios, ahora somos todos aquellos que somos hechos justos por la justicia de Cristo, no por nuestras buenas obras o esfuerzos, sino los que creemos en Él.

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¿Que oración podríamos hacer aquí? Gratitud, de como somos bienvenidos a su presencia, delante de un Dios no habita con el malo, con el orgulloso o altivo, con los que hacen iniquidad, con los mentirosos, con los asesinos, con los tramposos, somos bienvenidos por su amorosa gracia, por su amor inagotable, que al saber que merecíamos ser rechazados por nuestras rebeliones y abundancia de maldad ahora nos podemos alegrar porque somos justos por medio de nuestra fe en Cristo.

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¿Se fijan como un salmo nos dijo como era Dios? Él sigue siendo el mismo, ahora es mi deseo el ser como Él. La exposición a la Palabra es la clave para conocer a Dios, es la clave para mi santificación, es la clave para que Él esté activo en mi vida, el Espíritu Santo hará su obra en nosotros y cobrará vida.

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Hermanos no importa que libro de la Palabra quieras leer, pero leelo y busca como es Dios y leelo a través de los lentes del Evangelio. Mi oración es que la próxima semana apartes un tiempo para leer la Biblia y orar y que sin tomarlo de una manera religiosa lo veas como lo más vital de tu día. Que Dios nos ayude a ponerlo en primer lugar en nuestras vidas.

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Bendiciones.

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Por Jorge Franco 

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La palabra y la santificacion

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